- Supresión inmediata del turno obligatorio de sábado buscando otras medidas organizativas -contratación- para no dejar de prestar el servicio.
- Implicación del presidente de Correos, SEPI y Hacienda en la aprobación del R.D. lo antes posible.
- Seguir negociando las medidas organizativas apuntadas en la Mesa del día 4 de julio para, una vez aprobado el R.D., proceder a su implementación.
Ante la situación creada, incluso sabiendo que el problema no es imputable a la falta de voluntad de Correos para ejecutar el Acuerdo, la solución no puede ser la de mirar a otro lado y mantener la situación de ilegalidad. CCOO y UGT coinciden en la idea de que la huelga es el último recurso tras agotar todas las vías de negociación para alcanzar una solución consensuada.
Por ello, creemos oportuno advertir a quienes corresponda la potestad de resolver esta cuestión que dar la callada por respuesta y dejar pudrir el problema conllevaría abrir la vía a una fuerte conflictividad. En este caso, sería una conflictividad de verdad, no para la galería.