UGT valoró positivamente el contenido del proyecto en los artículos que hacen referencia a las sustituciones y ratios. Sin embargo, fuimos críticos en lo relativo al horario lectivo de los docentes, ya que no establecía número determinado de horas lectivas y dejaba en manos de las comunidades autónomas esta regulación.
En este sentido, UGT presentó en el Consejo Escolar del Estado enmiendas al anteproyecto de ley y hemos venido insistiendo en que el Ministerio de Educación debería establecer con carácter básico la parte lectiva de la jornada semanal del personal docente, y proponiendo que la jornada lectiva de los docentes sea de un máximo de 20 horas en Educación Infantil y Primaria y de 18 en las restantes enseñanzas.
Consideramos que, respetando la autonomía de las CCAA en materia educativa para fijar competencias propias de los docentes, el establecimiento de la jornada lectiva de los mismos, como la jornada laboral de los empleados públicos, debe tener un tratamiento común en todo el territorio nacional.
El Consejo Escolar del Estado aconsejó la modificación del texto en este sentido, pero en el articulado modificado apareció solo la recomendación a las CCAA de establecer con carácter ordinario un máximo de 23 horas en los centros de Educación Infantil y Primaria y Especial, y un máximo de 18 horas en el resto. Esto mejoraba el texto original, pero seguía sin establecerse el carácter básico de este horario.
Ya en el Senado, el texto se vuelve a enmendar y se establece que con carácter general la parte lectiva de la jornada semanal sea de 23 horas en los centros de Infantil y Primaria y Especial y de 18 horas en el resto.
El primer paso dado en el Senado es positivo, y nos satisface que la norma tenga carácter básico. Pero a UGT le hubiera gustado una reducción mayor de la jornada lectiva de los docentes españoles, para homologarnos a nuestros colegas europeos y poder hacer nuestro trabajo en mejores condiciones: más tiempo para la innovación, para la coordinación, para la atención personalizada a padres y alumnado, menos burocracia…
UGT viene expresando su preocupación por la tramitación de este proyecto de ley, y esperando su aprobación definitiva lo antes posible para que puedan hacerse efectivas ya en el próximo curso las medidas que se recogen. Esperamos que se mantenga y que por vía de la negociación, se mejore. Apelamos a la responsabilidad y coherencia de los partidos políticos para culminar con acierto el próximo trámite en el Congreso.