UGT en la Agencia Estatal de Administración Tributaria (AEAT) denuncia la gestión de la AEAT y, en concreto, de la Dirección Adjunta de Vigilancia Aduanera (DAVA) a la que califican de temeraria, negligente y opaca. Según UGT en la AEAT, este organismo ha puesto en jaque la operatividad de la flota marítima del Servicio de Vigilancia Aduanera (SVA) y ha ocultado riesgos gravísimos para la salud de los trabajadores de manera sistemática. Ante esta situación, UGT en la AEAT reclama que se asuman inmediatamente responsabilidades técnicas y directivas.
Durante años, la Dirección Adjunta de Vigilancia Aduanera ha ocultado la existencia de materiales con amianto en las embarcaciones de su flota, hasta que la evidencia ha sido tan contundente que ya no se ha podido barrer bajo la alfombra. En la embarcación Alcaraván I(Santander), tras dos años de denuncias por parte de UGT que fueron ignoradas por la DAVA, se ha confirmado la presencia de crisotilo (amianto blanco). El polvo que caía sobre los tripulantes no era una “molestia menor”, sino una amenaza cancerígena. Y ahora, al comprobar que otras embarcaciones del mismo modelo y astillero están igualmente afectadas (Bilbao, Gijón, Ribadeo, Muros), se ha tenido que paralizar la flota del norte.
Además, la AEAT ha optado por esperar el resultado de la concentración de fibras de amianto en el aire que realizará, en lugar de activar el Protocolo de Vigilancia de la Salud específico por trabajar en un entorno con amianto, cuando la normativa establece claramente la obligación de realizar esta vigilancia específica frente al riesgo de exposición al amianto, con respecto a sus trabajadores y las familias de éstos, así como con respecto a las personas contratadas por empresas externas para realizar reparaciones, mantenimiento, limpieza o tareas de seguridad.
Para UGT en la AEAT estas maniobras pueden suponer una dejación de funciones con respecto a la obligación de garantizar la salud y la seguridad del personal a su cargo. Es una temeridad esperar a los resultados de estas pruebas, que difícilmente van a dar un resultado diferente, sin tener en cuenta lo que puedan decir los expertos de la existencia de un alto riesgo debido al estado de degradación del amianto existente y sobre todo por el hecho de que ese amianto ha sido manipulado, recortado y taladrado durante operaciones de mantenimiento, sin ningún tipo de protección y llenando los barcos de fibras de amianto que han estado respirando los trabajadores.
La flota: Amianto, grietas y fracaso industrial
Para UGT AEAT, la situación roza lo grotesco: además de la paralización de cinco embarcaciones en el norte por riesgo de amianto, se encuentran con una flota desguazada por las averías, sin mantenimiento efectivo, y con ejemplos de despilfarro e incompetencia que ofenden a cualquier servidor público. El caso del buque Cóndor, construido por el Astillero Rodman Polyships, es paradigmático: más de 8 millones de euros invertidos hace apenas cuatro años y hoy se encuentra con lo que parecen grietas estructurales que comprometen seriamente su integridad y navegabilidad. Otro escándalo técnico que la DAVA ha preferido tapar con informes tibios y excusas sin base técnica.
El fiasco de las patrulleras Audaz
A la precaria situación en la que se encuentra la flota antigua, hay que sumarle el fracaso de las nuevas inversiones. Solo dos, de las ocho embarcaciones rápidas del modelo AUDAZ facturadas, se han entregado y ambas han presentado fallos en los motores hidrojets y problemas de diseño han obligado a modificar el espejo de popa. Estas embarcaciones, también construidas por el Astillero Rodman PolyShips, tienen un coste unitario de 1,8 millones de euros -en total más de 14 millones- acumulan diecisiete meses de retraso en la entrega y son tiene no tiene capacidad operatia para cubrir grandes tramos del litoral español.
Liquidación: la AEAT malvende la flota aérea del SVA como si fuera chatarra
UGT en la AEAT denuncia que la enajenación de la flota aérea del Servicio de Vigilancia Aduanera (SVA) constituye un ejemplo paradigmático de gestión pública descuidada y desprovista de toda lógica económica y operativa. El desmantelamiento de cuatro aeronaves —equipadas con tecnología de alto valor como telefonía satelital, AIS y sistemas optrónicos valorados en millones de euros— se realizó a precios de saldo, con licitaciones que llegaron a situarse por debajo incluso del coste de un solo contrato de mantenimiento de motores aún vigente.
Es escandaloso que, tras inversiones acumuladas de más de siete millones de euros en mejoras tecnológicas e infraestructuras operativas, la AEAT liquidase el conjunto por importes ridículos que ni siquiera cubren el coste de los repuestos instalados. Una venta acelerada y opaca a la empresa Emiratos Khalifa Capital, con indicios de desidia institucional y una alarmante falta de planificación estratégica, que no solo vacía de capacidades al SVA en la lucha contra el narcotráfico y el contrabando, sino que implica una pérdida patrimonial directa para las arcas públicas. Este episodio, lejos de ser anecdótico, retrata una Administración que abdica de su deber de diligencia y eficiencia en la gestión de bienes públicos estratégicos.
UGT en AEAT ha exigido una investigación urgente sobre las actuaciones de la DAVA en materia de Protección de Riesgos laborales y gestión operativa; la paralización total del acceso a las embarcaciones sospechosas de contener amianto hasta que se disponga de informes firmados por técnicos competentes que garanticen la seguridad y salud del personal de la AEAT y la activación de protocolos específicos de vigilancia de la salud para todo el personal potencialmente expuesto al amianto, propio y externo, conforme al RD 396/2006.