Representantes de la Federación de Empleados y Empleadas de los Servicios Públicos de UGT (FeSP-UGT) Región de Murcia han rechazado en la Mesa Negociadora del Ayuntamiento de Murcia las bases para la provisión de plazas por movilidad para la Policía Local por ser discriminatorias y por incumplir la actual Ley 4/1998 de Coordinación de Policías Locales de la Región de Murcia.
El Secretario de Administración Local de FeSP-UGT, José Juan González, explica que se trata de unas Bases que se corresponden con la reserva del 20% de las plazas a agentes de cuerpos policiales de ayuntamientos de la Región que quieran optar a una de las 4 plazas ofertadas en el Ayuntamiento capitalino.
Estos agentes, que ya lo son en su ayuntamiento de origen y están en activo, con estas bases tendrán ahora que volver a superar pruebas de actitud psicotécnica, entrevista personal con psicólogo, pruebas físicas, etc. Además, estas bases establecen una serie de requisitos como la imposibilidad de llevar tatuajes, así como una amplia tabla de exclusiones médicas.
No obstante, González recuerda que según la Ley regional de Coordinación de Policías Locales a las plazas de movilidad “se accede exclusivamente por concurso de méritos” y no por concurso-oposición, que es lo que vienen a establecer las bases aprobadas por el Ayuntamiento y el resto de organizaciones sindicales, menos UGT.
En este sentido, señala que si la preocupación del Consistorio murciano es velar por la salud de los agentes de Policía Local “podía haber regulado un reglamento de segunda actividad que garantizara que solo los miembros que reúnan las condiciones físicas adecuadas realicen funciones operativas, alejando así a los mayores de 55 años de aquellos cometidos diarios de mayor peligro”.
Por último, el responsable de Administración Local critica que el Ayuntamiento de Murcia no haya tenido en cuenta en cuenta el arraigo o las circunstancias personales de los candidatos a ocupar esas plazas “que seguramente serán ciudadanos del municipio que tratarán de conciliar de la mejor forma posible su vida laboral y familiar”.
“El equipo de Gobierno local debería ser un ejemplo y, sin embargo, vuelve a equivocarse y a quedarse en la edad de piedra junto a los sindicatos que secundan estas bases, bien con su aprobación bien con su abstención”, concluye.