Al constante ritmo de cierre de dos escuelas infantiles por semana que se venía produciendo hasta el pasado mes de febrero, hay que añadir la inevitable pérdida de alumnado que se puede producir con motivo del final del curso escolar en la etapa del 0-3 en las escuelas infantiles más pequeñas, de titularidad y gestión totalmente privada. Existe un riesgo cierto de que dichas escuelas infantiles quedasen sin actividad para el resto del curso escolar al finalizar la alerta sanitaria.
FeSP-UGT muestra una especial preocupación porque el sector de la Educación Infantil tiene un empleo femenino de manera casi absoluta, por lo que la situación que se podría generar sería objeto de una mayor desigualdad. Por esta razón, el sindicato considera prioritaria la constitución de la mesa de trabajo por el empleo en la Educación Infantil que se aprobó crear en la última reunión de la comisión negociadora del convenio colectivo y que la Federación de Empleadas y Empleados de los Servicios Públicos de UGT apoyó de manera explícita.
FeSP-UGT dará toda la importancia al mantenimiento del empleo en el sector y para ello apoyará cuántas iniciativas vayan en esa dirección, como la creación de una lista de trabajadoras de centros de Educación Infantil en crisis y recolocación de empleo específica para la Educación Infantil cuando esta crisis sanitaria finalice.