La Federación de Empleados y Empleadas de los Servicios Públicos (FeSP-UGT)de la Región de Murcia condena enérgicamente las agresiones al personal y los destrozos realizados a las instalaciones del hospital Virgen de la Arrixaca por los familiares de una paciente que murió en quirófano.
Estos familiares, ante el fatal desenlace, agredieron, amenazaron e insultaron a los profesionales y produjeron múltiples destrozos en las instalaciones del hospital. La afluencia cada vez mayor de familiares de la fallecida hizo necesaria la presencia de la Policía Nacional, para evitar que se produjeran males mayores.
UGT considera inaceptable que el personal sanitario del centro tenga que enfrentarse a situaciones como esta, que pone en riesgo tanto su integridad física como mental, a la vez que considera que la seguridad privada contratada por el Servicio Murciano de Salud (SMS) es claramente insuficiente en casos como este.
Unos hechos tan lamentables como el fallecimiento de un ser querido no pueden ni deben desembocar en situaciones violentas como la que se ha producido. El personal trabaja por asistir lo mejor posible a los usuarios, aunque desgraciadamente nunca se puede descartar el fallecimiento de un paciente en procesos de riesgo.
UGT recuerda que los cauces para conocer y reclamar el por qué de estos desenlaces se debe hacer por las vías administrativas, y si hace falta judiciales, pero nunca arremetiendo con violencia precisamente contra los que están tratando de mejorar o salvarle la vida.
UGT anima a los trabajadores del SMS a denunciar este tipo de agresiones para concienciar y sensibilizar a la sociedad, al sistema judicial y a las administraciones públicas.
Por último, UGT exige al SMS que asuma sus responsabilidades y ponga en marcha medidas efectivas que garanticen y mejoren la seguridad del personal y de los centros y que lleve a cabo procesos de educación a la ciudadanía para que no se vuelvan a producir agresiones en el ámbito sanitario.
