En múltiples ocasiones nos hemos dirigido a los órganos directivos del IMAS y a la Dirección General de la Función Pública para poner en su conocimiento los obstáculos que existen en la gestión de los centros que atienden a personas con discapacidad y en las residencias de personas mayores dependientes del IMAS para exigirles condiciones materiales, funcionales y los servicios precisos para atender a todas las personas que se encuentran en estos centros de forma adecuada a sus necesidades.
Escasez de personal, elevadas cargas de trabajo, un sistema de contratación de sustituciones que no cumple con la obligación de atender en tiempo y forma las bajas que se producen, unas ratios de atención directa que llevan demasiado tiempo sin actualizarse, una gestión de los recursos que difiere en cada centro,… son algunos de los problemas que venimos señalando pues complican el trabajo cotidiano, provocan un clima laboral de hastío y descontento fundamentalmente entre el personal de atención directa.
El pasado 22 de marzo nos movilizamos para pedir a la Gerencia del IMAS que impulsará la adopción de medidas urgentes para garantizar la calidad de unos servicios sociales publicos esenciales pues sólo podrán cumplir con su cometido en la medida en que sea capaz de proporcionar a todos sus profesionales las oportunidades y los apoyos necesarios para realizar eficazmente su tarea.
Y de nuevo las organizaciones sindicales UGT, FSES, CSIF y La Intersindical volvemos a concentrarnos dos meses después junto a los trabajadores y trabajadoras del IMAS, ante la falta de respuesta a las reivindicaciones que realizamos, para seguir reclamando los servicios necesarios que garanticen una atención adecuada en función del nivel de exigencia de cuidados y las condiciones de cada centro y para que se comprometan en la búsqueda de soluciones que resuelvan las carencias que venimos reclamando.