Cientos de trabajadores y trabajadoras de instituciones penitenciarias, convocadas por UGT, CCOO y Acaip, se han encadenado en la calle Alcalá de Madrid para visibilizar los problemas del colectivo. Los tres sindicatos llevan meses reclamando por distintos medios una negociación real para solucionar la decadencia de las condiciones laborales. Han advertido que si el Gobierno no se sienta a negociar, convocarán una huelga general a nivel nacional.
Antonio González, responsable del Sindicato de Prisiones de UGT, es contundente: «Los profesionales de instituciones penintenciarias estamos en pie de guerra porque la administración vulnera el derecho a la negociación colectiva con los legítimos representantes de los trabajadores. Ya tuvimos una gran manifestación en la que 10.000 trabajadores y trabajadoras de instituciones penitenciarias tomamos las calles de Madrid. Hemos estado cinco años sin concurso de traslados, sin carrera profesional… tenemos un déficit anacrónico y endémico de personal; un 15% de las plazas están sin cubrir. Estados además muy mal retruidos, padecemos brecha salarial, dependiendo de dónde trabajes puedes cobrar entre 300 y 700 euros menos. Somos un servicio público destinado a reinsertar a personas privadas de libertad, y esto en un mandato constitucional: la administración mira para otro lado y da comienzo a la privatización servicios tales como limpieza, vigilancia, etc»
210 funcionarios de prisiones se encadenan para exigir mejoras en su trabajo